Foto: Carmen del Puerto.
Recuerde
el alma dormida,
avive el
seso y despierte
contemplando
cómo se
pasa la vida,
cómo se
viene la muerte
tan
callando…
(De las hondas Coplas de JORGE MANRIQUE)
Se llamaba Roberto y se ha ido, tan joven, sin
permiso.
Me siento torpe buscando palabras que
consuelen, que me consuelen.
Quizá no existan.
A mi amiga Elena, por ese dolor tan lacerante
que hoy compartimos.
“Knockin’on Heaven’s Door”, triste canción inmortal
de Bob Dylan:
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